domingo, 27 de abril de 2008

¡Pobre de mí!

Querida Anita:
Aunque repudio el “victimismo emocional”, escucha lo que tengo que confesarte:
¿A qué he llegado?: A un completo fracaso. Los enemigos y la mala suerte me persiguen; cuanto más avanzo, más me hundo;…muchas personas encuentran protección porque se manifiestan débiles y saben cómo pedir ayuda. A mí, nadie me ha protegido porque me consideraban fuerte y he sido demasiado orgulloso…
Esta es la pura y simple verdad.

Besos
Tordon
PD: He oído decir lo mismo a Paul Gauguin. Creo que voy a demandarle por plagio.(O invitarle a llorar juntos)

No hay comentarios: